15 de junio de 2009
Del Terror a la Libertad, origen y cauces de la Revolución Francesa, se expone en el edificio El Bicentenario hasta el 16 de agosto de 2009

Estas actividades se realizan con el propósito de consolidar la identidad histórica del Ecuador y de reforzar los lazos de la identidad Latinoamericana. En principio se conformó el Grupo Bicentenario, que fue conformado por Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, México y Venezuela, en donde posteriormente entro a formar parte Ecuador. Y al cual se ha integrado también España.
Concretamente en Quito, donde se reconstruyó el Antiguo Hospital Militar, se nombró al edificio del Centro de Arte Contemporáneo como: El Bicentenario. Y en honor a la Revolución Quiteña se trajo desde el Museo de Louvre 110 piezas (entre grabados, dibujos y algunos objetos) de la colección de Edmond de Rothschild sobre la época de la Revolución Francesa.
La temática de la exposición refleja la crisis de la monarquía absoluta de Luis XVI y posterior conformación de la Asamblea Constituyente que concluyó con la Revolución Francesa de 1789.
Para traer estas piezas desde el museo más importante del mundo, el Centro Cultural Metropolitano ha establecido vínculos con el Louvre desde hace dos años, en un principio para realizar talleres de conservación de papel. María Elena Machuca, directora del Centro, se trasladó a Francia e hizo el contacto con Pascal Torres que es el conservador que está a cargo de la colección de Rothschild.
A Torres se le planteó la necesidad de hacer una exposición con esas obras por la proximidad del Bicentenario, principalmente para establecer el nexo que hubo entre la Ilustración francesa y la Ilustración quiteña que permitió a nuestros próceres despertar los deseos de libertad.
Torres llegó a Quito hace cinco meses para verificar el lugar de la exposición (en este caso se seleccionó el Centro de Arte Contemporáneo porque ahí está la exposición de la Revolución Quiteña) revisó el espacio junto con un historiador con el que se pusieron de acuerdo para armar el contexto de cómo sería la exposición.
Se exigió información técnica del edificio en un ‘Facility Report’, donde, entre otras cosas, se describen condiciones climáticas, distribución de las obras, distancia al aeropuerto, etc.
Francisco Morales, jefe de museología del Centro Cultural Metropolitano, quedó a cargo de coordinar el montaje de la exposición, para lo cual se cerraron ventanas, se acondicionó la circulación de aire, se ubicó un sistema de iluminación especial y se implementó sistemas de seguridad para cumplir con los requerimientos del Louvre.
"Con nuestros restauradores se estableció el manejo de los parámetros técnicos tanto de iluminación como de microclima que es lo que más afecta a las obras" explica Morales.
Cuando Torres regresó a Francia llevaba consigo un primer listado de las posibles obras que finalmente se trajeron. Son 110 piezas que finalmente se trajo, pero la exposición completa cuenta con obras de la Real Audiencia de Quito, como retratos de Pedro Vicente Maldonado, el Barón de Carondelet, Juan Pío Montufar, José Mejía Lequerica, Manuela Cañizares, mapas de la época e incluso el libro donde consta el acta de grado de la defensa de Eugenio Espejo para graduarse como médico, es decir: el Libro de Oro de la Universidad San Gregorio.
La importancia de Eugenio Espejo dentro de esta muestra es el aporte de la conciencia patriótica, es por esto que varios de los objetos expuestos están en estrecha relación con el prócer ideólogo de la Revolución Quiteña, quien en la Colonia promulgaba las ideas de llegar a ser una patria independiente.
Entre las obras icono que se pueden apreciar en “Del Terror a la Libertad, origen y cauces de la Revolución Francesa” se encuentran varios de los primeros grabados en color de la historia basados en el concepto de tetricromía; testimonios de los hechos que acontecieron en la época; propagandas políticas (durante el período de la Revolución Francesa) a favor y en contra de la monarquía.
Uno de los grabados imprescindibles de la exposición es “Luis XVI decapitado” que es la más explícita fuente de la esencia de la muestra con un texto de amedrentamiento para los contrarrevolucionarios de Maximilien Robespierre. La pieza más valiosa, más que por su precio (está avaluada en €300 000) es una reliquia contrarrevolucionaria –de unos 15 x 15 cm- donde está graficado el Cordero de Dios, en alusión al origen divino del rey, en donde se nota en el centro una mancha que supuestamente es una gota de sangre que se dejó caer de la cabeza de Luis XVI.

Por el contrario, la pieza más valiosa por su costo es el cuadro de Carlos Montúfar y Larrea valorado en USD 3 000 000.

Montar esta exposición supuso un costo que sobrepasa los USD 150 000 en seguros, transporte de las piezas vía avión, catálogos, venida del curador del Louvre, pasajes, estadía. Los fondos principalmente municipales del Fondo de Salvamento (Fonsal) y de auspiciantes y socios estratégicos como la Embajada de Francia, Banco de Guayaquil, KLM, Alianza Francesa, Hotel Mercure, Global Transport y otros.
El principal aporte lo realizó el museo del Louvre al prestar la exposición sin cobrar el alquiler.
En “Del Terror a la Libertad”, trabajan alrededor de 40 personas, entre los que se encuentra un equipo de 10 guías. Los trabajadores han sido carpinteros, arquitectos, museógrafos, restauradores, el curador de la exposición de los coordinadores.
Sin duda esta es una muestra distinguida dentro de los festejos del Bicentenario, que marca la importancia del vínculo ideológico entre la Revolución Francesa y la Revolución Quiteña –sin que esto signifique que la Revolución Francesa haya provocado la Revolución Quiteña-.
ENLACES DE INTERÉS:
- Si te gustó esta entrada puedes dar un Paseo Virtual por la exposición
- ¡Vive nuestra historia! la página web de La Revolución Quiteña
- Escucha el podcast con explicaciones sobre la muestra en Podomatic
Que es un Facility Report (informe de Instalaciones) para museos

12 de junio de 2009
Eugenio Espejo: precursor del pensamiento revolucionario

Se conoce que Francisco Xavier fue bautizado un 21 de febrero de 1747, en la capilla del Sagrario de la Iglesia Matriz de San Francisco de Quito. Su padre el Dr. Luis de la Cruz y Espejo (Chusig) , cirujano y administrador del Hospital San Juan de Dios, y su madre María Catalina Aldaz. Tuvo dos hermanos: Juan Pablo y Manuela.
A sus cortos 18 años inicia sus estudios en Medicina en la Universidad Dominicana de Santo Tomás de Aquino. A Los 20 se gradúa como médico. Llamado “chuzig” como recordatorio de su descendencia, atravesó una serie de impedimentos que le permitieran ejercer su carrera médica a plenitud.
Según Edmundo Estévez, en su libro “El Arte de Curar y enseñar”, Espejo solicita el 14 de agosto de 1772 el permiso para ejercer la profesión de médico, debido a que fue negada ante el tribunal del Cabildo. El pretexto: “No tenía ciencia alguna”. En el campo de las ciencias médicas, varios aspectos lo posicionan como uno el mejor médico de nuestra historia.
Las ideas de la época colonial del siglo XVIII, motivan en el pensamiento de Eugenio, un espíritu liberal e humanista. Espejo se convierte en promotor del despertar de la razón quiteña, al leer autores como Montesquieu, Voltaire, Roseau o Diderot.
Las ideas de Espejo, fueron el punto de partida de una nueva concepción de lo que hasta ese entonces se entendía por patria, afirma el historiador Jorge Núñez, autor del libro Eugenio Espejo y el pensamiento precursor de la independencia . “Se empieza a entender por patria a Quito, y ya no a España. Nace una toma de consciencia sobre lo que será después la nación ecuatoriana”.
El escritor ecuatoriano Gonzalo Rubio en su libro titulado con el nombre del galeno criollo, afirma que tenía una gran afición por la lectura de libros de toda índole, lo que le motivó el aprendizaje en otras materias.
La cuna del pensamiento revolucionario
Espejo funda con Juan Pío Montúfar y Marqués de Selva Alegre, la Escuela de la Concordia, durante un exilio en Bogotá en el año de 1789. Grupo que se denominó después Sociedad Patriótica de Amigos del País. Su objetivo: dar inicio al proceso independentista. Dos años más tarde, se publica la primera hoja del primer periódico de Quito, que recogía sus fines: Primicias de la Cultura de Quito.
“Pero mis deseos son ambiciosos, y así querría que Quito, para venir a dar el lleno de sus cultura y civilización, juzgase que estaba el último ápice de la rudeza primitiva, donde no puede hallarse ni un átomo de luz…”
8 de junio de 2009
Juanelo es miembro honorario de la UNE

Visión de los periodistas deportivos actuales

Como su temática es de fácil comprensión; es entretenida; llega a mucha gente y permite licencias en el estilo, al periodista deportivo le cuesta, y mucho, autoimponerse frenos. Se tiende al comentario constante, irresponsable y poco profundo, a bombardear con opiniones más que con noticias. Esto le resta calidad al oficio.
A la vez, el deporte en una primera mirada no es un tema decisivamente complejo. Si se puede "sobrevivir" en el medio con conocimientos básicos, no vale la pena una mayor instrucción, piensan algunos. Y con el tiempo, estos malos periodistas son superados en su conocimiento por las fuentes (cada vez más instruidas) y, en ocasiones, hasta por el lector, oyente, televidente o blogero. Algo bastante serio, tomando en cuenta que difícilmente pueda existir, como en el deporte, un campo de conocimiento donde el periodista se enfrente a un público más "culto" en la materia. Por ende, cualquier error se hace demasiado notorio.
Muchos periodistas, sin el menor interés por filtrar la información, caen en la invención. Buscan impactar con lo que tengan a mano (declaraciones rimbombantes; contrataciones que pueden ser y luego no son; rumores; intereses creados) sin reparar en la calidad informativa o en el real aporte de la entrega.
Como en ningún otro campo, lamentablemente, quien se dedica al periodismo deportivo tiene licencias y facilidades para ejercer la profesión sin ser profesional, sin haber pasado, jamás, por una Universidad. Es muy normal que antiguos deportistas, que eran muy buenos en la cancha pero que no lo son tanto frente a un micrófono, una cámara, o detrás de un computador (salvo honrosas excepciones, como las hay siempre en la vida) partan haciendo comentarios y se pasen, de a poco, a ejercer ilegalmente el periodismo sin poseer el nivel necesario para hacerlo.
3 de junio de 2009
La última religión que está de moda


26 de mayo de 2009
La gripe del millón

En el mundo, cada año mueren dos millones de personas víctimas de la malaria, que se podría prevenir con un mosquitero.
Y los noticieros no informan nada…Pero hace unos años, cuando apareció la famosa gripe aviar… los informativos mundiales se inundaron de noticias… chorros de tinta, señales de alarma… ¡Una epidemia, la más peligrosa de todas!...
25 de mayo de 2009
Reflexiones sobre la evaluación docente en Ecuador
La educación es un tema muy sensible dentro de una sociedad porque tiene relación con su futuro. Si los maestros se niegan a ser evaluados, más bien presionados por su sindicato, se enfrentan a una imagen mediocre frente a los ciudadanos. Este es un tema muy comentado en el país pero todo se ha quedado prácticamente en la polémica.
Personalmente pienso que ningún profesional debería tener miedo a una evaluación porque las evaluaciones no son represiones sino un instrumento que permite conocer la realidad de la educación. Con ello las medidas que se tomen o las planificaciones que se realicen serán más exactas o menos propensas al error.